miércoles, 29 de mayo de 2013

Conociendo a... Lourdes T. Castillo

Inauguro esta sección de entrevistas (cuyo futuro es aún incierto, porque soy algo tímida para estas cosas) para que conozcáis un poquito mejor a la autora de Gálora: Ojos de fuego (pinchar para ver reseña).


Un aviso para madrileños o asistentes a la próxima Feria del Libro de Madrid:

Puede que Gálora en persona esté pululando cerca de la caseta de firmas...

¿Cuánto tardaste en escribir Gálora? ¿Cómo fue, en resumen, el proceso desde la primera y más minúscula idea de Gálora hasta que la historia se convirtió en lo que hoy es? ¡Corrígeme si me equivoco al afirmar que este es el resumen más difícil al que te has enfrentado!
Ja ,ja, ja, pues sí es difícil resumirte los 9 años que tardé en escribir este libro. Y es que aparte de que también trabajo, soy muy perfeccionista. ¡Es algo terrible pero que voy aprendiendo a controlar! Ja, ja. Gálora tuvo su origen en un sueño que tuve. Fue digamos la idea desde la que desarrollé el amplío mundo de Círax y el Continente. Cuando empecé no se me pasó por la mente en ningún momento que fuese a ser una historia tan compleja. Creí que haría un cuento, como mucho. No obstante, los personajes cobran vida de alguna forma y se han hecho con el control de mi libro. ¡Y mira en qué lío me han metido ahora!
El proceso para escribir te lo resumiré en una palabra: tiempo. Solo se requiere tiempo para hacerlo. Dedicarle sus horas y comprender que llevar una idea a la realidad no sucede de la noche a la mañana. Pero si tu pregunta es más bien por cómo me organizo, puedo decir que en base a las escenas. La historia tiene un ritmo que cada vez debe ser mayor, más rápido e interesante. O al menos, así lo veo yo. 

Todos hemos tenido que enfrentarnos alguna vez a una página en blanco, quisiéramos o no (recordemos esa asignatura llamada Lengua y Literatura). Unos lo haríamos con desgana, otros con empeño e ilusión y, tal vez, otros pasaran por ambas fases. ¿Cuál es tu caso? ¿En qué momento, y por qué, escribir se convirtió en algo especial para ti? 
El llamado "miedo a la página en blanco" no me ha sucedido nunca. Siempre tengo algo que escribir. Aún cuando no tenga nada que ver con Gálora. Tengo algunos cuentos y otro libro en el que estoy trabajando, pero la verdad es que nunca tuve problemas para desarrollar mis fantasías inagotables. También es cierto que Lengua era una asignatura que me costó aprobar y es que la sintaxis se me da fatal. Afortunadamente, a base de escribir y escribir creo que he aprendido muchísimo aunque soy consciente de que todavía me queda un largo camino por delante. Y esto es quizás lo que más me gusta. Saber que mañana lo haré mejor que hoy.
En cuanto a tu pregunta sobre en qué momento y por qué escribir es algo especial para mí, te diría que sencillamente es mi vida. Desde que tengo cinco años he querido escribir. Es algo que siento que llevo dentro y que creo, es para lo que he nacido. No obstante, es cierto que no comencé a escribir hasta los 16 años. Mi padre falleció debido a un trágico accidente en aquel entonces y aquello es algo que marcó un antes y un después en mi vida. A él también le gustaba escribir, sobre todo poesía. Solía hablarme de literatura y de los grandes libros que tenía que leer. Sentí la necesidad de expresar todo lo que llevaba dentro y solo se me ocurrió que podía hacerlo escribiendo. Me di cuenta de que la vida de pronto puede darte duros golpes y que da igual lo bien que actúes o el plan de futuro que tengas: la vida no es predecible, es corta. Y todo esto junto, me hizo escribir más aún. Si quería ser escritora mañana, tenía que comenzar a escribir hoy porque quizás no hay mañana.

Varios personajes de Gálora, y especialmente la propia Gálora, se caracterizan por su fuerte personalidad. También tienen características físicas que los hacen únicos (además de que son de distintas razas). ¿En qué te basas para crear tus personajes? Físicamente, ¿necesitas imaginártelos con detalle, tienes algún modelo, te basas en gente conocida? ¿Crees que hay que tener los personajes completamente pensados (incluso conocer su pasado) antes de escribir una historia o, por el contrario, eres más de los que improvisan sobre la marcha?
La verdad es que no me baso en nada para crear mis personajes. Me los imagino así según la necesidad de la propia historia. Quiero decir, si necesito crear un villano, por ejemplo, automáticamente en mi mente surge una personalidad concreta. Quizás los rasgos los creo incluso cuando ya me pongo a escribir una escena con ese personaje, antes que imaginármelos. Obviamente, hay ciertos personajes que debido a su importancia, matizo mucho más. Pero nunca me he basado en gente conocida. Cada persona es única y mis personajes también lo son.
Respondiendo a tu segunda pregunta, estoy totalmente convencida de que lo primero que se necesita para saber cómo es un personaje es conocer su pasado. Aunque después el lector no lo conozca, como autora debo saber cómo reaccionaría ante cada situación en base a las experiencias que le han influenciado a lo largo de su vida. Es una de las partes que más me gustan de escribir. Conocer cómo reaccionarían ante una determinada situación y saber que cada uno lo haría de forma distinta.

Barlan es un personaje que me "enamoró", pero debido a su madurez, no tiene nada que ver con los atractivos muchachos tan de moda actualmente entre la novela juvenil. ¿Crees que sería capaz de seducir a las lectoras adultas? ¿Consideras que Gálora es una novela juvenil?
Yo creo que Barlan es un personaje que nos ha "enamorado" a todas un poco, ¿no? Son muchas las lectoras que me han dicho que quieren a un Barlan en su vida. Y no es ya que crea que sería capaz de seducir a las lectoras adultas, es que seguro que las seducirá. Es un hombre poco común. No diría que por su madurez, ya que a veces es un poco brusco y demasiado impulsivo. Diría que es más bien porque en su personalidad, al principio tan distante e incluso cortante, se produce una evolución cuando conoce a Gálora. Él cambia entonces. Sin darse cuenta. Pero es un hombre que ha cambiado y lo que le distingue de los demás es que acepta el cambio. Asume sus implicaciones y está dispuesto a vivir este nuevo camino que se abre ante él. Y eso es algo poco común hoy en día. Barlan no se anda con misticismos ni cobardías para vivir el sentimiento que Gálora le despierta. A pesar de resultarle desconocido y saber que ya no habrá vuelta atrás. Creo que todas queremos a un hombre que esté dispuesto a vivir el amor sin la excusa del miedo a lo desconocido. 
Mis personajes no viven un amor juvenil. Son adultos con problemas serios que viven el amor o cualquier experiencia desde la madurez. Es por ello que no diría que Gálora es una novela juvenil, pero eso es el lector es quien lo decidirá, por supuesto.

¿Qué sentiste la primera vez que tuviste el libro impreso entre las manos? ¿Cuál ha sido tu momento más feliz como escritora?
Pues la verdad es que me da un poco de vergüenza decirlo pero lloré. Me senté con el libro entre mis manos y de pronto me di cuenta que llevaba 9 años esperando aquel momento. Mi momento más feliz como escritora sin embargo fue el 28 de Diciembre de 2009, a las 2:39 de la madrugada cuando creí (ilusa de mí) que lo había terminado. Recuerdo que mis ojos se empañaron con lágrimas de alegría al pensar que por fin había puesto el punto y final. Desperté a mi hermana a pesar de la hora que era, porque me había insistido muchas veces que quería ser la primera en saberlo. Y cuando la llamé con lágrimas en los ojos diciéndole que había terminado el libro, me miró medio dormida y me dijo "¿me estás tomando el pelo?" Era, claro, la madrugada del día de los santos inocentes. Fue muy gracioso porque a mí ni se me había pasado por la cabeza, pero después cuando reaccionó, nos abrazamos sonriendo y lloré aún más todavía. Ese ha sido hasta ahora el instante más feliz como escritora que he vivido, junto con el día en que recibí el e mail de mi editor diciendo que querían publicar Gálora. Sentí entonces que mi corazón estallaría y que casi no podía respirar. Lloraba tanto que no podía hablar. Gálora siempre parece traer consigo lágrimas de felicidad en mi vida. Y que conste, que no soy de lágrima fácil.

¿Cuál es el objetivo que pretendías lograr al escribir el libro? ¿Querías transmitir alguna idea, hacer sentir algo al lector, o simplemente entretenerlo? ¿Hay mensajes ocultos en Gálora?
Pues podría decir que más que un objetivo para escribir el libro, tengo un objetivo como escritora. El libro es mi herramienta para cumplir con él. Pretendo que el lector sienta con mis personajes y si puede ser, que la experiencia que viven los mismos, le sirva también para aprender algo positivo. No lo hago de manera intencionada, pero cuando leo mi libro, si lo analizo objetivamente, me doy cuenta de que hay un profundo lenguaje filosófico para quien quiere verlo. Es cierto que hay mensajes ocultos en mi libro. Pero no solo trasmitidos por la propia Gálora, sino por cualquier personaje. Esmeralda, por ejemplo, un personaje que ha gustado mucho entre las lectoras, tiene un claro significado para mí. La historia de este personaje transcurre en paralelo con la de Gálora en un tiempo anterior. Es una joven maga de dieciocho años que ha vivido aislada toda su vida. Su historia comienza cuando su padre, el rey de Zelarú, le dice que está obligada a casarse con un príncipe de otro reino al que ni siquiera conoce, o si no, este reino no les prestará ayuda a su pueblo. Esmeralda atravesará grandes peligros para llegar al reino de su prometido e irá madurando y evolucionando según se le presenten los obstáculos. En el camino conocerá a un hombre que le despierta un sentimiento amoroso, imposible de vivir ante su actual situación. Esmeralda representa la inocencia y pureza de la juventud que se va perdiendo según la vida nos va golpeando. Una inocencia que lamentablemente está destinada a perderse. Sin embargo, me gustaría pensar que la forma en que esto nos afecta depende de la persona y no de las circunstancias. En el caso de Esmeralda, ya se verá...
Este es solo uno de los muchos mensajes.

¿Cuál ha sido la acogida de Gálora entre tus lectores hasta ahora? ¿Alguna mala crítica?
¡La acogida ha sido estupenda! Estoy muy contenta y agradecida. Todo lector que ha leído el libro me ha dicho que le ha encantado. Nadie hasta ahora me ha realizado una mala crítica. Si bien es cierto que me han dicho que la historia comienza despacio, coge buen ritmo y siempre a mejor. Algunos se han sorprendido por su calidad literaria siendo como es mi primer libro. Otros lectores me han dicho que les ha fascinado mi imaginación. Personas que no les gusta la fantasía lo han leído y me han dicho que les ha enganchado. Eso es algo que me han confesado muchos: Gálora te atrapa con sus enredaderas. ¡Hay gente que se lo ha leído en dos días y lo ha vuelto a empezar por segunda vez! Ni siquiera yo he tardado tan poco. La verdad, es que me ha emocionado que guste. Aunque también siento mucha presión ahora que estoy escribiendo el segundo. Todo el mundo me lo pide y espero no defraudarles.

Gálora: ojos de fuego es la primera parte de una saga. A algunos lectores esto les encanta; sin embargo, otros se echan atrás. ¿De cuántos libros estamos hablando en este caso? De paso, podrías contarnos que pasa por tu mente, como lectora, cuando te encuentras con la palabra "saga". ¿Te anima, te repele, te resulta totalmente indiferente...?
En principio hablamos de tres partes. Todo sea que lo cambie en el último momento y terminen siendo dos, pero puedo decir, con la seguridad de un 80 %, que Gálora será una saga de tres libros.
Como lectora, me resulta indiferente si una historia es trilogía o no. Depende básicamente de que me haya gustado la primera parte. Si no me gustó, por mucho que sea una saga, no continuaré leyendo. 

¿Cómo avanza la segunda parte? ¿Estás trabajando en alguna otra novela?
La segunda parte avanza muy bien. Estoy muy contenta, porque el primero tardé mucho tiempo en escribirlo y sin embargo, con esta segunda parte veo que he cogido mucha desenvoltura y seguridad. El único problema con el que me encuentro es que como está muy vinculado a la tercera parte, estoy escribiendo a la par esta última, por lo que en realidad estoy escribiendo el segundo y el tercero de tanto en tanto. 
Y sí, a la par estoy trabajando en otra novela, que más bien diría, es un cuento. Lo he terminado, solo a la espera de corregirlo, pero estoy tan absorbida por Gálora que no he tenido ocasión.

¿Lees habitualmente? ¿Tienes algún género o escritor favorito?
Leo siempre que puedo, el problema es que menos libros de los que me gustaría ya que la mayor parte del tiempo leo corrigiendo aquello que he escrito. Mi género preferido es la fantasía, pero la verdad es que cuando me quiero dar cuenta, paso la mayor parte del tiempo leyendo a mis escritores preferidos. ¡Y de ahí me cuesta salir! Sherrilyn Kenyon es una autora que sabe distraerme y me gusta su fantasía y su mundo de los cazadores oscuros. Pero a quienes de verdad más admiro son a Lope de Vega y Stephen King. Me rindo ante estos dos genios de la literatura. No obstante, esta opinión te la doy como lectora, jamás como escritora. Mi género preferido es la fantasía y las distopías.

Cuéntanos cuál ha sido el mejor libro que has leído este último año. ¿Y tu personaje favorito?
"Como agua para chocolate" de Laura Esquivel. Me encantó tanto la historia como la forma en que está escrito.
Es complicado decirte quién es mi personaje favorito de entre los libros que me he leído, pero creo que escogeré como chica a Katniss Everdeen (Los Juegos del Hambre) y como chico a Ender (El juego de Ender) Aunque Gollum (El Señor de los Anillos) también me pareció genial.

Y por último, cambiemos los papeles. ¿Qué pregunta le harías a un lector de Gálora? ¿Te gustaría saber con qué personaje se identifican más, qué escena les ha atrapado, dónde han leído tu novela, cómo la conocieron…? 
¡Por supuesto! Me encanta conocer la opinión de mis lectores. Creo que es importante saber qué opinan, ya que son la perspectiva objetiva que le falta a todo escritor. Las críticas, si son constructivas, son incluso necesarias. Siempre que alguien me dice que se ha terminado mi libro pregunto qué le ha parecido, cuál ha sido su escena preferida y cómo cree que va a continuar. Una de las preguntas que más hago es si les gusta más Esmeralda o Gálora. 

¡Muchísimas gracias Lourdes por la dedicación y el tiempo que te has tomado en responderme a las preguntas! ¡Y a vosotros, lectores, por llegar hasta aquí! 

--------
NOTA: hay un alto porcentaje de posibilidades de que dentro de poco vuelva Gálora; esta vez, con sorpresa. 

viernes, 24 de mayo de 2013

Intersecciones; de Pablo de Aguilar González

"-Es lo que me ha sucedido, Nanas. Entre tanta circunferencia, por fuerza las ha de haber secantes... Se cruzan unas con otras. Y por lo que sea, yo pasaba por una de esas intersecciones, y cambié la línea... Solo que en vez de dos líneas, lo que se cruzaron fueron dos universos de tres dimensiones. ¿Por qué no ha de haber una cuarta, una quinta? Siempre nos creemos el centro de la Creación. Primero fue la Tierra, luego, todo giraba alrededor del Sol, después la galaxia... ¿Por qué quedarnos donde estamos? Nunca aprendemos... Y no somos más que puntitos, Nanas...
-Fulgen...
-¿Lo entiendes, verdad?
-Fulgen... ¿Y si echamos otro?"
SINOPSIS
¿Qué ocurriría si, de pronto, eres otra persona? Fulgencio te cuenta la historia de cómo, a partir de un encuentro casual en el híper con un desconocido, todo su entorno cambia repentinamente. Su vida se ha convertido en la de un indigente al que la policía culpa de la muerte de otro vagabundo, y una sin techo desdentada parece ser íntima suya. Desde ese momento, el protagonista debe lidiar con dos problemas: recuperar su vida y averiguar qué sucedió en el crimen que se le achaca. Una trama ágil y divertida ambientada en los terrenos que nos son más cotidianos para disparar, con humor y gran acierto, el dardo de la sospecha sobre lo más sagrado que posee el hombre contemporáneo: su cómoda e incuestionable identidad.
Terminé de leer Intersecciones y sentí unas ganas irrefrenables de reseñarlo. Pero no podía. El tiempo brillaba por su ausencia. Así que abrí una pequeña válvula de escape y opiné en Amazon. Temía que todo lo que me había inspirado se desvaneciera...
Pero no, aquí sigue. Como el primer día. O mejor, algo menos apasionado. Es preferible poner un poco de distancia, que luego corres peligro de ponerte demasiado entusiasta, entusiasmar a los demás, y... las expectativas, que es malo que suban mucho. No vaya a ser.

Hay una palabra con la que se pueden resumir las dos novelas publicadas hasta el momento de este autor: entrañables. Hace tiempo que encontré las obras de Pablo de Aguilar Entre montones de libros y me animé con su novela Los pelícanos ven el norte, pero Mientrasleo (a cuyo "club" voy a unirme) no se rinde, y a causa de su insistencia decidí hacerme también con Intersecciones.  No fue un acto a ciegas: la recomendación hubiera caído en saco roto de no ser porque me encantó el estilo de Pablo en Los pelícanos. Además, mientras que dicha novela la leí en ebook, ésta que os traigo hoy la he podido disfrutar físicamente.

Ya las primeras líneas, que quise atisbar antes de pretender leerlo, me dejaron con ganas de empezarlo de inmediato. Y es que se trata de una novela muy finita, de apenas 173 páginas, pero con un contenido muy destacable. El inicio capturó mi atención enseguida: ¡construye teorías sobre universos valiéndose tan solo de puntitos y de líneas! A mí, no sé por qué, me maravilló la sencillez y el contenido de esa pequeña introducción. Pero ocurrió algo gracioso. Llegué al final y leí que en realidad era un fragmento del "Diario de Francisco Lorente" y me decepcioné. Ya estaba encumbrando a Pablo por ese magnífico comienzo, y a ese tal Francisco no lo conocía. Después me enteré de que era un personaje de la novela, y Pablo volvió felizmente a subir puestos (aunque, a aquellas alturas, ya casi no lo necesitaba).

Conocemos a continuación a Fulgencio, el protagonista y auténtico narrador. Él nos cuenta todo lo que le sucede; a veces parece que recurre a nosotros para desahogarse, o para no sentirse tan solo, pero desgraciadamente somos incapaces de ayudarle en eso. Él tenía una casa, a Susana y a su perro Babi. Empezamos acompañándolo mientras empuja el carro de la compra (que se desvía siempre hacia el mismo lado) y vamos presenciando, compartiendo su incredulidad, cómo lo que hasta entonces era su vida se transforma en la vida de otro. Él queda en el aire, sin nadie, sin nada, como una pluma que se balancea hasta que encuentra un lugar en el que posarse. Ese lugar es un banco, o un Hogar del vagabundo. Ese lugar, sobre todo, es Nanas.

Nanas es una vagabunda. Una más (aunque puede que él no piense eso) del grupo de vagabundos con el que Fulgen (así es como le conocen ahora) empieza a codearse en su nueva vida. Pero él no puede dejar de pensar que esa no es su vida. Sigue intentando encontrar un hilo que le permita volver a la anterior. Su suegra. Sus compañeros de oficina. A medida que pasa el tiempo, ya no sabe qué prefiere. Empieza a descubrir cosas. Y conoce al Francisco del que os hablaba, que le explica sus teorías sobre los puntitos y las líneas que se cruzan.

Y entre todo el lío, por si fuera poco, hay un asesinato y una misteriosa maleta.

Los que me conocen saben que me gusta mucho usar la palabra "creo", pero la voy a dejar de lado para asegurar que, sin lugar a dudas, Pablo de Aguilar ha encontrado un estilo literario propio. Lo digo después de haber leído sus únicas dos obras publicadas. Lo digo, ya de paso, deseando que haya más y que no pierdan esa personalidad propia. Creo (ahora sí) que, suponiendo que siguiese desarrollando ese mismo estilo, podría reconocerse sin dificultad entre varias novelas cuál ha sido escrita por él. Pero lo bueno que tiene desarrollar un estilo propio es cuando ese estilo es además agradable al lector. Como es lógico, al principio cuesta acostumbrarse: es algo nuevo, una combinación de palabras y de signos de puntuación que nunca antes has experimentado. En esta forma de narrar en particular llaman la atención las frases cortas, los muchos puntos y a parte, y la forma tan coloquial con la que el personaje narrador se dirige a nosotros. Pero es extraño y difícil de explicar porque, pese a parecer coloquial, al mismo tiempo resulta muy literario.

No hay descripciones detalladas, conocemos a los personajes a medida que avanza la historia y los mismos desprenden algo, llamémoslo ternura, o magia...  No sé, pero me ha ocurrido con Fulgen, sobre todo con Nanas, y ya sentí lo mismo con los personajes de Los pelícanos. Así que ahí tiene que haber algo. Es capaz de hacer todo eso a base de frases cortas, de pequeños trazos, como un cuadro impresionista lleno de puntitos (otra vez los puntitos) que son los que conforman la imagen global. 

No dejo de preguntarme qué hubiera sucedido de haberlo terminado en otras circunstancias. Pero las circunstancias fueron las que fueron, y entre el sentimiento que aportó el autor y el sentimiento que tenía yo dentro en ese momento, el final fue apoteósico. De modo que la experiencia de esta lectura no ha podido ser mejor: Intersecciones se me ha quedado grabado dentro.

Vaya, pues me ha quedado entusiasta, al final. Por cierto, la única pega que le pongo es que en una ocasión  me dio la impresión de que la historia se estancaba un poco. Ah, y una mísera errata. Os la recomiendo, por supuesto, pero no esperéis una novela al uso. Esta es distinta. Maravillosa pero distinta. Y, si os animáis, olvidad esta reseña (ojo: la reseña, ¡no el libro!); mirad el "rayo para olvidar". Mejor empezar con las expectativas a cero y que vayan subiendo exponencialmente... 

miércoles, 22 de mayo de 2013

22:22; de Dianna M. Marqués

"En la ancha avenida situada frente a mí, algún aventurero osaba conducir con lentitud su vehículo, convirtiendo la nieve sobre el asfalto en una masa marrón y sucia.
Una belleza realmente efímera, la de la nieve.
Me di la vuelta y saqué una preciosa instantánea del edificio de oficinas.
Una anciana cargada con varias bolsas de plástico me miró y sonrió al verme hacer otra nueva fotografía.
La miré, devolviéndole cortésmente  la sonrisa, mientras se alejaba por la calle.
El viento había cesado y ahora los copos caían con lentitud.
Eché un último vistazo antes de volver a mi rutina, llenando mis pulmones con el frío aire.
Un grito, precedido de un  ruido sordo, me hizo mirar en la dirección por donde se había marchado la anciana"
SINOPSIS
Para April, ya nada será igual después de perder a su padre. Rehacer su vida y encontrar el amor será algo prácticamente impensable, y menos cuando hay alguien que se empeña en añadir problemas por el camino, amenazando su felicidad. Por suerte, fuerzas desconocidas hasta el momento para ella, la ayudarán a darse cuenta de que el destino ya tiene sus planes.
Desde que conocí a Dianna a través de aNobii tenía la mosca detrás de la oreja, pero nunca encontraba el momento de leer algo suyo. Después de un tiempo volví a toparme con ella, esta vez a través de su blog. Entonces ya había escrito nuevas obras y algunas de ellas se ajustaban más a mis gustos que la primeras. Sin embargo,  he de admitir que no me animé del todo hasta que este libro apareció físicamente delante de mis narices, cuando una amiga lectora me lo prestó. Por cierto que la portada, diseñada por la propia autora, es una maravilla.

Os adelanto que no me ha decepcionado, pero tampoco me ha encantado. Los motivos son varios y personales en su mayoría. Tal vez el corte de esta novela es un poco más juvenil de lo que a mí me gusta. Pero, una cosa que me ha molestado y que tiene menos excusa, ha sido la presencia de numerosas faltas ortográficas. Se distribuían de manera curiosa, pues uno podía estar leyendo una prosa correcta durante varias páginas, y de repente se topaba con una concentración de palabras mal escritas en unas pocas líneas. Más curioso aún, un alto porcentaje de estas concentraciones se producían en los puntos más tensos de la trama. Evidentemente no he hecho un estudio estadístico; todo esto son las percepciones que he tenido y puedo estar equivocándome.

La novela tiene un buen comienzo; de hecho, antes de planear leerla eché un vistazo a las primeras líneas y despertó mi interés. Aunque pienso que la autora tiene que adquirir aún algo de destreza a la hora de escribir, me gustaron las descripciones de las calles nevadas de Barcelona y las percepciones del personaje con el que comienza la narración. También me llamó la atención la  gran cantidad de puntos y a parte; la mayoría de los párrafos constaban de una sola frase, pero eso es algo que puede o no gustar al lector (igual que puede o no gustarle, me vienen a la mente las reseñas de algunos de vosotros, el abundante uso de puntos suspensivos de Albert Espinosa).

La protagonista es una joven en la veintena que trabaja en un laboratorio de Los Ángeles, pero mantiene continuamente el contacto con su familia española. Allí la llaman April y vive en un piso con su amiga Danielle. Antes de que todo empiece a cambiar, está contenta con su trabajo y se lleva aceptablemente bien con su simpático compañero Ethan y con Steve, su jefe. Con la muerte de su padre tiene que regresar por un tiempo a España; donde vive con su madre y su hermana pequeña, y su nombre cambia a Abril. Sin embargo, la novela se centra en los hechos que se suceden tras el fatal acontecimiento, cuando April retoma de nuevo su vida y su trabajo y tiene que afrontarlo todo, pasando de ser una persona alegre por naturaleza a empezar a fingir que lo es. 

Al principio me mantuvo enganchada en una lectura agradable y entretenida. Los capítulos son cortos y sencillos de leer. Pese a que no ocurran grandes acontecimientos, tampoco se hace lenta. Es una novela de sentimientos (no hace falta que os diga que el principal es el amor) y de superación. No estoy segura de que el segundo factor esté bien tratado; en cuanto al amor, me parece que comienza magníficamente y  termina convirtiéndose en algo demasiado empalagoso de tan perfecto.

Mientras que April está aún en duelo por la muerte de su padre empiezan a sucederle cosas raras, tanto buenas como malas. Las malas, acosos y amenazas. Las buenas, grandes casualidades que parecen guiarla hacia un destino prefijado: sí, ese destino es el "amor de su vida". Esas grandes casualidades están articuladas en torno al número 22. April, como bióloga, es una persona muy cabal y no cree en estas cosas, pero llega un momento en que se hace evidente que el número 22 le está intentando decir algo. O... que alguien está intentando decirle algo a través de ese número. No puedo contaros más.

Si hay una parte de 22:22 que me ha gustado es esa idea mágica que contiene acerca de las "señales". Acostumbro a imaginar que hay determinados indicios a nuestro alrededor, ya sea en forma de coincidencias o mensajes ocultos que pasamos por alto. Esperad, no me toméis por loca todavía. Sólo es un componente de mi pensamiento mágico: me gusta creer que a veces la energía que nos rodea se comunica de alguna forma con nosotros... No sé, a veces son hechos tan simples como que el día de tu cumpleaños haga sol después de haber estado lloviendo toda la semana.

No os he hablado de la media naranja de April. No lo he hecho porque, en realidad, es tal la cantidad de candidatos que rodean a la protagonista antes de que el libro se vuelva pasteloso, que al principio no se sabe del todo con cuál va a terminar. También es muy graciosa la forma en la que se desarrolla la relación con él, y el chico es un encanto, pero sólo hasta que empieza a transformarse en la perfección completa desde (casi) todos los puntos de vista. 

Y después de una primera mitad bastante respetable y una segunda mitad tan solo aceptable, acontece el final. Para qué negarlo, pese a no ser una maravilla, me sorprendió. He de admitir que hay ahí un juego de palabras muy ingenioso

En definitiva, recomiendo este libro a quien le gusten este tipo de historias, ni más ni menos. Una mezcla de amor, con una pizca de humor, otro tanto de tragedia, e incluso suspense, personificado en la figura del misterioso acosador al acecho (recordad lo de la cantidad de candidatos que mencionaba).

lunes, 20 de mayo de 2013

Reinventarse: tu segunda oportunidad; del Dr. Mario Alonso Puig

"Hay personas que reaccionan inmediatamente con ira ante la más mínima provocación. Hay seres humanos que experimentan profundos sentimientos de culpa sencillamente cada vez que ocurre algo doloroso, aunque ellos no tengan nada que ver. Es importante saber que muchas de estas emociones no son nada más que patrones automáticos de respuesta, puros automatismos que hemos reforzado una y otra vez a lo largo de los años. Ahora quiero que el lector se imagine a las células de un cuerpo humano continuamente sometidas a ese aluvión de hormonas relacionadas con la ira o la culpa. La membrana va a necesitar desarrollar un mayor número de receptores, de puertas de entrada, ante la llegada de tantas moléculas. Es como si la propia célula se acomodara a este entorno químico y de esa manera se convirtiera en una célula con sentimientos de ira o de culpa. No cabe duda de que esto podría tener una repercusión en la manera en la que va a funcionar esta célula, en los genes que se van a expresar y en los que no."
SINOPSIS 
El Dr. Mario Alonso Puig nos ofrece un mapa con el que conocernos mejor a nosotros mismos. Poco a poco irá desvelando el secreto de cómo las personas creamos los ojos a través de los cuales observamos y percibimos el mundo. Son estos ojos los que tantas veces hacen que nos enfoquemos en las culpas del pasado y no en las posibilidades del futuro. El futuro que este libro nos permitirá afrontar con una nueva mirada.
Temo que la palabra autoayuda, que no me queda otra que escribir, os espantará a algunos de vosotros (como tal vez haría conmigo). Siendo estrictos, esto no es del todo un libro de autoayuda. Y diréis: "¿por qué? ¿porque aparece la palabra Dr. delante del nombre del autor?" El que sea un médico el que lo escribe no asegura que  vaya a ser algo científico. Y, pese a que está apoyado en la ciencia y ello se evidencia en varias ocasiones, a mí me ha dejado un sabor a autoayuda más que a ciencia.

A decir verdad, no es este un libro que pueda adjetivar como imprescindible. Tampoco me ha dejado huella. Si bien es cierto que lo que cuenta puede resultar interesante, que se lee fácilmente y que en ningún momento me ha resultado tedioso. Si lo he leído ha sido porque una persona me lo prestó, de forma desinteresada y con toda la ilusión. Ilusión que yo compartí pues me sorprendió que, pese a la poca relación que me unía a ella, tuviera a bien confiármelo. 

Durante toda la lectura también experimenté la continua sensación de haber leído aquello en alguna parte. Hubo algún fragmento que me recordó a El cerebro social, un libro de divulgación científica reseñado en el blog, muy recomendable por cierto para los curiosos del cerebro humano.

Creo que, pese a que me haya dado poca cuenta, de forma subrepticia Reinventarse me ha aportado algo, aunque fuese en el periodo de tiempo que estaba leyéndolo. A veces tengo una vida algo estresante (o yo misma me estreso) y tuve la sensación de que me ayudaba a mantener la calma y tomarme las cosas con más tranquilidad. 

Pero no todo trata de combatir el estrés. También nos habla, por ejemplo, de saber comprender y respetar a los demás, controlándonos en las situaciones en que sentimos unas ganas irrefrenables de "atacar" al prójimo. Es una parte que me gustó especialmente, aunque a veces se enfoca de una forma visiblemente religiosa, pero son ideas que se pueden extrapolar a cualquier ámbito. 

Con solo 177 páginas, está dividido en capítulos cortos, cada uno de los cuales se centra en una temática. En ellos el autor parece hablarnos de tú a tú y nos transmite las ideas de una manera clara y fácil de leer. Entre párrafo y párrafo se intercalan recuadros que destacan las sentencias más importantes del texto, así como un resumen de una frase al final de cada capítulo. Además, una de las cosas más entretenidas son las anécdotas o cuentos populares que de vez en cuando emplea el autor para ejemplificar sus testimonios.

Desde luego, no me atrevería a recomendarlo a alguien a quien la palabra "autoayuda" le cause alergia. No obstante me consta que es un libro que, en menor o mayor medida, ha contribuido a ayudar a algunas personas a salir adelante. Y, pese a que para mí no ha supuesto una gran lectura, si ha llegado a mis manos ha sido gracias al boca a boca, que ya es algo meritorio.


sábado, 18 de mayo de 2013

Danza de dragones; de George R.R. Martin

"Los hombres viven sus vidas atrapados en un presente eterno, entre las nieblas de la memoria y el mar de sombras, que es todo cuanto conocemos de los días que vendrán. Hay mariposas que viven toda su vida en un solo día, pero para ellas, ese pequeño espacio de tiempo dura tanto como para nosotros los años y las décadas. Un roble vive hasta trescientos años; una secuoya, tres mil. Un arciano puede vivir indefinidamente si nada lo daña. Para ellos, las estaciones son como el revoloteo de las alas de una mariposa, y el pasado, el presente y el futuro son lo mismo."
SINOPSIS
Daenerys Targaryen intenta mitigar el rastro de sangre y fuego que dejó en las Ciudades Libres al erradicar la esclavitud en Meereen. Mientras, un enano parricida, un príncipe de incógnito, un capitán implacable y un enigmático caballero acuden a la llamada de los dragones desde el otro lado del mar Angosto, ajenos al peligro que se cierne sobre el Norte, y que solo las menguadas huestes de uno de los reyes en discordia y la Guardia de la Noche se aprestan a afrontar.
Se me hace muy difícil enfrentarme a esta reseña. Está claro que no podré ser objetiva con ella, porque a mí ya me tienen ganada este señor y su saga Canción de hielo y fuego. Me puede contar lo que quiera acerca de sus personajes, que yo me lo leeré como una niña buena y me gustará igual. Bueno, a lo mejor no sirve cualquier cosa, pero sí es cierto que los seguidores de esta saga estamos tan metidos en ella, en su universo y entre sus personajes, que ya no sirve eso de "¿y a mí que me importa lo que le está pasando a este?". Cualquier cosa importa, no sé si me entendéis. Cuando conoces tanto a alguien, se ve ampliado el rango de hechos de su vida que te importan. Es tu amigo... o tu enemigo. O, simplemente, aún estás deseando conocerlo mejor.

Por eso no me importa que este libro de más de mil páginas termine casi  igual que como empezó. Casi, ¿eh? No del todo, que algo pasa. 

El libro comienza con intriga desde la primera, primerísima página: la portada. Sí, una espectacular portada que promete... algo que no sé si llega a ofrecer. Muchos creen que es un spoiler muy grande. ¿Lo es? Lo sabrás, lector, si haces lo propio con este libro. Es entretenido ir siguiendo las aventuras de Daenerys (uno de los personajes con los que más disfruto) y estar continuamente preguntándose, ¿será ahora lo del dragón?, ¿será entonces lo del dragón? Hasta terminar pensando, ¿cuándo narices llega lo del dragón? Hasta que llega, y lo tienes que leer aunque sea mientras caminas por la calle sin mirar por donde vas. Sí, bueno, esperaba más. Pero Dany montada en un dragón es Dany montada en un dragón. Emocionante ya de por sí. Y lo que viene después... ya es más criticable. Si no fuera por eso de que me importa cualquier cosa que les pase a los personajes, la despedida de este en concreto es larga, lenta y un pelín decepcionante.

Y mi otro favorito: Tyrion. A él sí, le pase lo que le pase, a él sí que le sigo hasta el fin del mundo (que a este paso llegará ahí). Tenía un poco de miedo con el Tyrion de Danza porque había oído que no era el de siempre, que decepcionaba. Yo no lo veo así: claro que es distinto, tenía que serlo por la fuerza después de todo lo que le ha pasado y le sigue pasando. Pero pienso que su cambio está más que justificado y que no es tan drástico. No, no me ha decepcionado en absoluto; aunque sí que lo ha hecho, una vez más, la lentitud con la que avanzan los acontecimientos, el no ver llegar determinados momentos que uno espera que lleguen. El tener que esperar la llegada de los Vientos de invierno... 

Tal vez, la trama que más novedades ha mostrado ha sido la de Bran. No me esperaba para nada la aparición de SPOILER los hijos del bosque, con su peculiar fisionomía que me dejó fascinada, o ese extraño ser-árbol... FIN DEL SPOILER. Si bien es cierto que tampoco hay muchos capítulos, sí que introduce elementos nuevos e interesantes. Más complejidad para una historia que cada vez se enreda más, en especial a esa especie de competición entre dioses/religiones que... ¿podría ser el verdadero eje de la saga?

Pero una de las cosas que más sorprende es la aparición repentina de cierto personaje que da un giro inesperado a los acontecimientos. ¿Será verdad? Las malas lenguas dicen que es otro de los trucos de los conspiradores que rondan el Trono de Hierro. Y pensar en ellos me hace recordar el final de Danza de dragones, un final que esperaba temerosa de que no estuviera a la altura y que, pese a no ser perfecto, consiguió sorprenderme lo suficiente como para dejarme cierto grado de satisfacción

En fin, que esto es muy difícil. Cada uno de los personajes cuenta con momentos determinantes que marcan sus vidas de manera más o menos importante. Pongo de ejemplo a Cersei. Mencionaría tantas cosas... pero soltaría un spoiler detrás de otro. Es sin duda un libro para hablar de lector a lector. Para elaborar mil y una teorías y más. Y es que si algo tiene Canción de hielo y fuego, es que da para especular y desmadejar hilos y ver cómo pueden unirse de la mejor manera. Cosa que se me da fatal, aunque hay quien descubre interesantes conexiones. Hay tanto escondido entre las letras...


Pese a la pega del lento avance de los acontecimientos, para mí sigue siendo  un: